El pasado 27 de marzo la Agencia Vasca de Innovación- Innobasque convocó a un grupo de personas a una sesión de trabajo para la discusión y aportaciones a la futura “Ley de Transparencia y Buen Gobierno“ del Gobierno Vasco, y en ella estuvo participando Begoña Etxebarria, directora de NSF, quien nos trasmite los contenidos de lo que allí se habló.
La primera parte de la mañana contó con las ponencias de Albert Serra, Director del Programa Executive Master in Public Administration de ESADE quien expuso el marco general y los fundamentos y alcance de dicho tema, y de Koldobike Uriarte, Directora de Coordinación de Lehendakaritza, quien se centró más concretamente en el trabajo que están desarrollando en esta materia en Vitoria .
Después de la pausa-café se pudo debatir por mesas los distintos contenidos que deberían recogerse en esta ley referidos a tres aspectos: participación, transparencia , y planificación y evaluación.
En el I Seminario Icaro Think Tank de Novia Salcedo Fundación, habíamos identificado este tema como uno de los retos que teníamos que abordar en el nivel SOCIEDAD, si deseábamos avanzar en la revalorización de los liderazgos políticos para reducir el poder de la economía sobre la Gobernanza.
La ponencia de Albert Serra fue completa e inspiradora. Sería muy deseable que quienes tiene la responsabilidad de elaborar la Ley trataran de ajustarse a este marco de referencia para que supusiera un auténtico cambio en la calidad de la Gobernanza, que es en definitiva, lo que queremos todos.
Albert Serra tiene larga experiencia como gestor en distintas entidades públicas y no lucrativas, además de su vertiente académica, y se le nota. La primera cuestión que planteó fue que una Ley de Transparencia y Buen Gobierno no se hace para luchar contra la corrupción, transparencia y Buen Gobierno es mucho más. “Gobernar Bien las Buenas Cosas” (“Do Right the Right Things”) implica ser capaz de gestionar bien toda la cadena de valor e identificar bien lo que tiene valor social. Buen Gobierno incluye al menos cinco cuestiones: 1)Transparencia, 2)participación , 3)cooperación, y todo ello orientado a la 4)eficacia y la 5) efectividad.
Buen Gobierno es la suma de seguridad jurídica (marco legislativo que evita la corrupción y pone límites), transparencia y orientación a resultado.
Pero hay otros conceptos que van unidos también a la calidad de la Gobernanza y sobre los que convendría construir significados compartidos: autoridad, legalidad, confianza (en sentido de fiabilidad) y confianza (en sentido de “Trust” – credibilidad), implicación y complicidad y coproducción de valor público.
También se habló de la necesidad de contractualizar; de que los ciudadanos exijan a la acción de Gobierno con un programa y objetivos que puedan ser evaluados, según recursos, y tiempo de consecución. Para ello hay que dar calidad y accesibilidad a la Información relevante, que permita realizar la tarea de seguimiento y rendición de cuentas. Y sobre todo, responsabilizarse de los resultados, que en todo momento se puedan identificar a las personas responsables de las decisiones.
Para todo ello, se hace necesario construir un sistema de medición de indicadores de gestión (output) y de indicadores de aportación de valor social (outcome), porque “este es el diferencial en el que consiste hacer política en ser capaces de plantear lo que tiene verdaderamente tiene valor social “.
En las discusiones se planteó la necesidad de disponer de organismos independientes de evaluación que hagan este seguimiento , porque si no, -preguntó- “¿Quién evalúa? ¿Evalúan la técnica? ¿ la prensa? o ¿los juzgados? “
Quedó también clara la necesidad de hacer extensiva la trasparencia de forma global y para todos en la gestión de lo público, sean los que gestionan gestores públicos, privados o no lucrativos.
A pesar de que se hizo el ejercicio de tratar de desbrozar los principios y el camino de posibles contenidos de la futura Ley, todas las personas participantes compatían que el “Buen Gobierno no depende de la legislación, sino del comportamiento de las personas.“
Una vez más, tozudamente, se volvía a las personas y su comportamiento. Tenemos mucho trabajo por delante y un largo camino que recorrer, como decimos en Icaro ThinkTank “menos mal que tenemos 50 años para hacerlo”…