El Informe Mundial sobre las Ciencias Sociales 2010 pone de manifiesto los progresos de los países emergentes. Ha sido publicado conjuntamente por el Consejo Internacional de Ciencias Sociales (CICS) y la UNESCO. Bajo el título “Las divisorias del conocimiento”, este Informe ofrece, por primera vez desde hace más de un decenio, una panorámica global de las ciencias sociales. Centenares de científicos sociales del mundo entero han contribuido con sus conocimientos especializados a esta publicación.
“Los trabajos de los especialistas en ciencias sociales son de notable calidad y de un gran valor práctico, pero el conocimiento científico de la sociedad, tal como señala este Informe, suele ser el que menos desarrollado está en aquellas partes del mundo donde más perentoriamente se necesita”, dice la Directora General de la UNESCO, Irina Bokova, en su prólogo a la publicación. “Asimismo, los esfuerzos realizados en el campo de las ciencias sociales, al tender a concentrarse demasiado en los países industrializados de cultura anglosajona, no dan todos los resultados que cabría esperar. De esta manera, se está desperdiciando la oportunidad de explorar perspectivas y paradigmas arraigados en otras culturas y lenguas”.
Esas “brechas del conocimiento” constituyen el tema principal del Informe Mundial sobre las Ciencias Sociales 2010 que estudia cómo evolucionan estas ciencias ante condiciones desiguales y tendencias divergentes. El Informe destaca que las ciencias sociales son más necesarias que nunca para tratar con eficacia los problemas más graves con que tropieza la humanidad, desde la pobreza hasta las epidemias, pasando por el cambio climático. Sin embargo, debido a las profundas disparidades que se dan en las capacidades de investigación, la contribución de las ciencias sociales a esa empresa no es tan importante como podría ser.
El Informe tiene un triple aspecto: descriptivo, con una presentación de hechos y estadísticas sobre la producción de las ciencias sociales y su difusión en el mundo; orientado a la solución de problemas, con un examen de la aplicación de las ciencias sociales a la problemática de la sociedad contemporánea; y reflexivo, con ensayos en los que se discurre sobre perspectivas generales y temas de interés regional.
Los 10 capítulos del Informe abarcan, entre otros, los temas siguientes: ciencias sociales y cambios mundiales; panorama de las ciencias sociales en las distintas regiones del mundo; capacidades en materia de investigación y fuga de cerebros; internacionalización; competición en la sociedad del conocimiento; y elaboración de políticas. En el capítulo final se proponen diversos medios para reforzar las ciencias sociales, por ejemplo, el aumento de la financiación, la realización de trabajos de investigación con objetivos específicos, la mejor difusión de esos trabajos, y la promoción del plurilingüismo y de los enfoques multidisciplinarios.
Según el Informe, las revistas especializadas editadas en América del Norte y Europa Occidental siguen representando el 75% de las publicadas en todo el mundo, y el 85% de las mismas están redactadas total o parcialmente en inglés. La cuarta parte de esas revistas se editan en Estados Unidos, y las dos disciplinas sobre las que se publican más artículos en todo el mundo son la economía y la psicología. Las dos terceras partes de las revistas de ciencias sociales del mundo entero se editan en cuatro países: Estados Unidos, Reino Unido, Países Bajos y Alemania.
El Informe de la UNESCO y el CICS pone también de manifiesto las tendencias contrastadas que se observan en las distintas regiones del mundo. Las ciencias sociales se están desarrollando en países como China, la India y Brasil. En este último país, por ejemplo, el número de investigadores en ciencias sociales se multiplicó prácticamente por tres en el último decenio. En China, el presupuesto dedicado a las ciencias sociales y humanas ha venido aumentando entre un 15% y un 20% anual desde 2003.
A pesar de los desequilibrios existentes en materia de publicaciones e investigadores, el Informe observa que la progresión más fuerte del número de artículos publicados se dio en América Latina y Europa. En cambio, las ciencias sociales han experimentado un retroceso importante en la Federación de Rusia y la Comunidad de Estados Independientes (CEI) desde la desintegración de la Unión Soviética: el número de investigadores ha disminuido, su promedio de edad ha aumentado considerablemente y las universidades rusas tienen muchas dificultades para atraer a los jóvenes con talento. En el África Subsahariana, el 75% de las publicaciones dedicadas a las ciencias sociales emanan de un grupo reducido de universidades ubicadas principalmente en tres países: Sudáfrica, Kenya y Nigeria.
Esta situación explica, en parte, la fuga de cerebros observada en África, aunque esta región no es, por supuesto, la única afectada por este fenómeno. Con respecto a la fuga de cerebros, el informe señala también que en Estados Unidos uno de cada tres doctores en economía y casi uno de cada cinco doctores en ciencias sociales son oriundos de países extranjeros
Según el Informe, el mundo necesita más que nunca recurrir a las ciencias sociales para afrontar los grandes problemas de la humanidad, desde la pobreza hasta las epidemias, pasando por el cambio climático. Debido a las disparidades en materia de investigación existentes entre los Estados, las ciencias sociales no responden a esos problemas en la medida en que deberían hacerlo. Centenares de científicos sociales del mundo entero han contribuido con sus conocimientos especializados a la realización de esta publicación. En la presentación pública del Informe estuvieron presentes, entre otros: Gudmund Hernes, Presidente del CICS, François Héran, director de investigaciones del Instituto Nacional de Estudios Demográficos (INED) de Francia, Adebayo Olukoshi, director del Instituto Africano para el Desarrollo y la Planificación (IDEP), y Hebe Vessuri, directora del Departamento Estudio de la Ciencia del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC).
“Las ciencias sociales han cobrado una dimensión verdaderamente planetaria porque se enseñan prácticamente en todas las partes del globo y porque los resultados de sus investigaciones son objeto de una amplia difusión”, dice Gudmund Hernes, Presidente del CICS. Al mismo tiempo, señala que han sido objeto de críticas frecuentes por no haber sabido prever acontecimientos tan importantes como la caída del Muro de Berlín en 1989 o la crisis financiera de 2008. No obstante, Hernes estima que “para afrontar los desafíos actuales y futuros y tratar eficazmente los problemas mundiales y locales, es vital contar con más trabajos en ciencias sociales y mejorar su calidad, esto es, tratar de comprender cómo funciona el mundo a partir de las formas de interacción de los seres humanos”.
El informe original en inglés se puede descargar aquí