De nuevo prevalece la seguridad -el inmenso negocio de la seguridad- sobre la paz. De nuevo los buitres de la guerra vencedores. No había dinero para reducir las enormes brechas sociales, para ayudar al desarrollo endógeno y evitar así estas emigraciones desesperadas… y ahora, de pronto, hay mucho dinero para la guerra.
Ya se intentó dar un aldabonazo bélico con Irán, después de la vergonzosa y dolosa invasión de Irak, basada en la simulación y la mentira. Pero la actitud de Obama lo evitó. Luego, cuando Israel bombardeó escuelas y hospitales, la OTAN, como suele hacer en estos casos, miró hacia otro lado. En la guerra de Siria se advirtió que parte de los insurgentes no eran «sociedad civil» sino combatientes fanáticos yihadistas y de Al-Qaeda. Por cierto, se dijo y se ha repetido, que los yihadistas recibían subvenciones de Qatar y Arabia Saudita. ¿Es verdad eso? Dígannos, ¿es verdad?. Porque si lo fuera la única reacción responsable y admisible sería dejar inmediatamente de negociar con estos países, denunciarlos,… y el Barça y otros beneficiarios deberían eliminar los nombres de estos países de sus camisetas…
Sede de la Organización de Naciones Unidas. New York |
¿Es verdad, puede ser verdad el «eje» Arabia Saudita-Qatar-Israel-Partido Republicano de EEUU? ¡Dígannos que no, acrediten que no! Esperamos, espero sinceramente, que no.
Pero si existiera, si procuraran que, otra vez, la fabricación de cohetes y de bombarderos volviera a funcionar a toda marcha, al tiempo que siguen muriendo de hambre y desamparo miles de seres humanos al día, al tiempo que otros muchos se ven forzados a abandonar sus lares para huir de la miseria extrema… entonces, «Nosotros, los pueblos…» les pediríamos muy severamente cuentas a los que mandan; a los que han marginado a las Naciones Unidas; a los que nos han impuesto los grupos plutocráticos G6, G8…; a los que cambiaron los principios democráticos por los mercados; a los que ahora se frotan las manos anunciando («El País», 6 de septiembre de 2014) que «Los 28 países aliados (OTAN) acuerdan gastar más en defensa ante los nuevos desafíos». Después de un fallido golpe de Estado en Ucrania, la Unión Europea se moviliza… ¿Qué ha hecho el «cuarteto»? ¿Qué ha hecho el inefable Sr. Blair durante los luctuosos ataques a Palestina?
Siempre ha prevalecido, en un mundo históricamente sometido a un poder absoluto masculino, la fuerza sobre la razón, las balas sobre las palabras. Pero esto tenía lugar cuando los seres humanos eran silenciosos, temerosos, obedientes, sumisos. Ya no lo son. Quieran o no quieran reconocerlo los «aferrados» a la inercia y a sus privilegios, el tiempo de su predominio, de sus acciones ensombrecidas e inexplicadas, de la influencia ilimitada de los servicios de inteligencia… está llegando a su fin.
¡Claro que hay que evitar urgentemente que los fanáticos sigan cometiendo desmanes! pero procurando, a la vista del material militar ya disponible, que estas acciones no sean excusa para otro intolerable incremento de la producción armamentística.
El poder ciudadano, en poco tiempo, hará que la paz prevalezca y que los dragones de la guerra abandonen el escenario que hasta ahora han ocupado. El poder ciudadano refundará un multilateralismo democrático, unas Naciones Unidas para la nueva era. Poder ciudadano, la palabra. Poder ciudadano para la transición histórica «de la fuerza a la palabra».