Aglutina a más de 10 millones de empresas que se encuentran en la búsqueda de candidatos
Las empresas han trasladado su área de reclutamiento a la red social LinkedIn. Esta plataforma se ha convertido, sin duda, en un escaparate laboral en el que la presencia es prácticamente obligatoria para conseguir un puesto de trabajo. Pero, ¿qué pasa cuando no se tiene mucha experiencia profesional para mostrar?
La especialista en estrategias de marketing y LinkedIn, Inge Sáez recomienda a los jóvenes el uso
de esta herramienta «como un gestor de la marca profesional a medida que se va creciendo profesionalmente».
«Siempre se tiene experiencia», añade Sáez. Lo que puede faltar es la experiencia profesional remunerada, pero experiencia profesional que no ha sido pagada también es una fortaleza en esta red de redes.
Por ejemplo: las prácticas realizadas en el periodo de estudiante, el trabajo como colaborador, tener un blog activo, un libro, el proyecto de fin de carrera, etc, todo puede aportar. Además, en este extracto se pueden resumir los viajes. «Lo importante es que este extracto cuente qué profesional quieres ser, a qué tipo de personas o empresas puedes ayudar, cómo puedes lograrlo», detalla la experta.
Una de las razones por la que los jóvenes deberían tener un perfil en esta red es porque en este lugar se encuentran las empresas que necesitan personal o empresas que pueden convertirse en futuros clientes. El idioma coge importancia en este ‘currículum online’ que permite crear un perfil en otra lengua. En estos últimos años, la plataforma ha incorporado los vídeos de presentación, anticipándose a las entrevistas presenciales. «Todo suma al momento de presentarnos, la manera para que contacten con los candidatos».
Errores en el perfil de LinkedIn
Uno de los errores que los jóvenes cometen cuando tienen un perfil en esta red es no publicar nada. El silencio en esta plataforma puede pasar factura. «Piensan que como no tienen nada que decir, no ponen nada», señala. Para ello se debe completar el perfil, escribir las aptitudes, actitudes y los intereses. Igualmente, incluir las recomendaciones, por ejemplo, del mentor de tu carrera.
También es importante compartir conocimiento. El muro en LinkedIn permite publicar contenido relevante de los temas que te apasionan y que van en sintonía con la empresa. Esta información ofrece la posibilidad de demostrar aquello en lo que estás interesado en trabajar. No se necesita tener una web para publicar información.
A menudo se agregan los estudios y no se añade más información. «Tenemos que contar qué aprendimos en la universidad», indica Sáez. Se puede escribir respondiendo a las siguientes preguntas: ¿qué he aprendido en la carrera, en el máster, o programa de especialización? Definitivamente, estas acciones pueden hacer que una persona que tiene poca experiencia sean atractivas al empleador.
Bajo esa línea, Fundación Novia Salcedo organiza un taller de LinkedIn y Networking con el objetivo de potenciar el perfil profesional trabajando. El programa se compone de dos sesiones de mañana de cinco horas cada una. Los participantes aprenderán la tipología de contactos, cómo acceder a ellos, cómo gestionar una red de contactos online. Para inscribirse en el curso gratuito pueda pinchar aquí.
