El número de pobres aumenta y el número de ricos también. La
clase media se está mermando. Es lo que pasa en los EEUU… ¿y en Europa? “Struck
in the middle” es el título de un artículo de Rana Foroohar en TIME del
15 de agosto, con un «Informe Especial: Lecciones de la Debacle de la Deuda» (de EEUU). Es difícil de traducir exactamente en tan pocas palabras en
español. Mejor tomar el subtítulo “Without a growing middle class, there’s no
growth” (“Sin una clase media
creciente, no hay crecimiento”). Rana Foroohar es BA en literatura inglesa
por la Universidad de Columbia, es directora adjunta de redacción de TIME, tiene
un excelente currículum como periodista y reportera, ha sido premiada con el
Premio Peter Weitz de la Fundación Marshall alemana, y es miembro del Council
on Foreign Relations (CFR), un “think tank” estadounidense independiente y
apolítico, cuya misión es informar al gobierno de los EEUU y otros,
empresarios, periodistas, educadores y estudiantes. También es colaboradora con
el Foro Económico Mundial.
clase media se está mermando. Es lo que pasa en los EEUU… ¿y en Europa? “Struck
in the middle” es el título de un artículo de Rana Foroohar en TIME del
15 de agosto, con un «Informe Especial: Lecciones de la Debacle de la Deuda» (de EEUU). Es difícil de traducir exactamente en tan pocas palabras en
español. Mejor tomar el subtítulo “Without a growing middle class, there’s no
growth” (“Sin una clase media
creciente, no hay crecimiento”). Rana Foroohar es BA en literatura inglesa
por la Universidad de Columbia, es directora adjunta de redacción de TIME, tiene
un excelente currículum como periodista y reportera, ha sido premiada con el
Premio Peter Weitz de la Fundación Marshall alemana, y es miembro del Council
on Foreign Relations (CFR), un “think tank” estadounidense independiente y
apolítico, cuya misión es informar al gobierno de los EEUU y otros,
empresarios, periodistas, educadores y estudiantes. También es colaboradora con
el Foro Económico Mundial.
Rana Foroohar dice que el 1% de los estadounidenses acopa
alrededor del 20% de los ingresos totales, un valor cerca del que hubo en le “época
dorada” de los EEUU en el siglo XIX. En 1970 tenían tan solo el 8%. El resto de
los americanos no han visto un aumento en cerca de cuatro décadas. “La brecha de bienestar entre blancos y
negros es ahora un abismo. De acuerdo con un estudio de Pew, el bienestar medio
de los hogares blancos es ahora 20 veces el de los hogares negros, lo que hace
que la brecha es casi dos veces que en la época de la Gran Recesión”, cita
Rana Foroohar. Y añade que la crisis financiera ha agravado el problema, porque
ha dado lugar a una crisis de la vivienda de la clase media mientras que los
que tienen salarios altos mantienen su seguridad y quedan al margen del problema.
Rana Foroohar vaticina que el acuerdo (entre Demócratas y Republicanos) sobre
la reducción de la deuda de los EEUU aumentará esta brecha, y quizás de forma
dramática. Continúa diciendo que “los
detalles del acuerdo favorecen a los ricos, dado que los que viven bien se
escapan de los nuevos impuestos, y los pobres reciben el hacha del gasto en su
espalda en la forma de la reducción de subsidios del paro, eliminación de
empleos del sector público, y la falta de aumento de gasto en programas que
puedan reforzar el empleo o ayudar a reformar a los trabajadores.” Rana
Foroohar cita al economista de Harvard Kenneth
Rogoff: “Es difícil reducir el tamaño
del gobierno ahora mismo, sin exacerbar la desigualdad”.
alrededor del 20% de los ingresos totales, un valor cerca del que hubo en le “época
dorada” de los EEUU en el siglo XIX. En 1970 tenían tan solo el 8%. El resto de
los americanos no han visto un aumento en cerca de cuatro décadas. “La brecha de bienestar entre blancos y
negros es ahora un abismo. De acuerdo con un estudio de Pew, el bienestar medio
de los hogares blancos es ahora 20 veces el de los hogares negros, lo que hace
que la brecha es casi dos veces que en la época de la Gran Recesión”, cita
Rana Foroohar. Y añade que la crisis financiera ha agravado el problema, porque
ha dado lugar a una crisis de la vivienda de la clase media mientras que los
que tienen salarios altos mantienen su seguridad y quedan al margen del problema.
Rana Foroohar vaticina que el acuerdo (entre Demócratas y Republicanos) sobre
la reducción de la deuda de los EEUU aumentará esta brecha, y quizás de forma
dramática. Continúa diciendo que “los
detalles del acuerdo favorecen a los ricos, dado que los que viven bien se
escapan de los nuevos impuestos, y los pobres reciben el hacha del gasto en su
espalda en la forma de la reducción de subsidios del paro, eliminación de
empleos del sector público, y la falta de aumento de gasto en programas que
puedan reforzar el empleo o ayudar a reformar a los trabajadores.” Rana
Foroohar cita al economista de Harvard Kenneth
Rogoff: “Es difícil reducir el tamaño
del gobierno ahora mismo, sin exacerbar la desigualdad”.
Hagamos un pequeño cálculo hipotético: con la mitad del
sueldo de un solo alto directivo que gana 1,2 millones de euros al año, se
podría dar trabajo a 50 jóvenes mileuristas. 10 Ricos, con aceptar ser un poco
menos ricos, darían trabajo a 500, 100 a 5000. Y al alto directivo le quedarían
todavía 600.000 euros, con los que puede seguir viviendo muy muy bien. Los
ricos tienen sus necesidades más que cubiertas y sus mayores gastos no son
precisamente los bienes de primera necesidad sino un chalet lujoso y por lo
menos otro para vacaciones, coches de alta gama, un yate de unos cuantos metros
de eslora, quizás un jet privado, una colección de joyas de oro y diamantes, alojarse
en hoteles de 5 estrellas como mínimo, etc. La mayor parte de la industria vive
de la producción y venta de bienes de necesidad (alimentación, vestimenta, mobiliario,
utensilios, sanidad e higiene, etc.) no de la producción de objetos de lujo.
Por lo que si procuramos que los pobres adquieran más poder adquisitivo,
favorecería a la economía. Mantener o aumentar los salarios de los ricos no
favorece el crecimiento (salvo si reinviertan gran parte en un sistema productivo
que crea empleo). Rana Foroohar tiene razón cuando dice que para salir de la
crisis hay que aumentar la clase media, y no la clase rica. Una amplia clase
media cualificada es la que mantiene en vida la industria.
sueldo de un solo alto directivo que gana 1,2 millones de euros al año, se
podría dar trabajo a 50 jóvenes mileuristas. 10 Ricos, con aceptar ser un poco
menos ricos, darían trabajo a 500, 100 a 5000. Y al alto directivo le quedarían
todavía 600.000 euros, con los que puede seguir viviendo muy muy bien. Los
ricos tienen sus necesidades más que cubiertas y sus mayores gastos no son
precisamente los bienes de primera necesidad sino un chalet lujoso y por lo
menos otro para vacaciones, coches de alta gama, un yate de unos cuantos metros
de eslora, quizás un jet privado, una colección de joyas de oro y diamantes, alojarse
en hoteles de 5 estrellas como mínimo, etc. La mayor parte de la industria vive
de la producción y venta de bienes de necesidad (alimentación, vestimenta, mobiliario,
utensilios, sanidad e higiene, etc.) no de la producción de objetos de lujo.
Por lo que si procuramos que los pobres adquieran más poder adquisitivo,
favorecería a la economía. Mantener o aumentar los salarios de los ricos no
favorece el crecimiento (salvo si reinviertan gran parte en un sistema productivo
que crea empleo). Rana Foroohar tiene razón cuando dice que para salir de la
crisis hay que aumentar la clase media, y no la clase rica. Una amplia clase
media cualificada es la que mantiene en vida la industria.
“Exacerbar la desigualdad”,
como dice Ken Rogoff, tiene como
consecuencias que crece el número de “indignados” y puede llegar a situaciones
extremas como los disturbios de Londres y de otras ciudades británicas. A esto
dedica TIME gran parte de su número
siguiente, del 22 de agosto, que da a su portada el título fatalista “The
Decline and Fall of Europe” (El declive y la caída de Europa) en el que
demuestra que el problema es tanto o más de Europa que de los EEUU. En este
número Rana Foroohar escribe otro
artículo estelar: “El Fin de Europa – Su unión económica se está desenmarañando,
Londres está en llamas, y su socio comercial del que dependía el continente,
los EEUU, es demasiado débil para salvar el día o el euro. Di adiós al viejo
orden.” Cita de nuevo a Kenneth
Rogoff: “Europa está a punto de
estallar. Ya no es cuestión de permanecer quietos ni de esperar a que los EEUU
vayan a poner en marcha la economía. Tendrán que arreglar las cosas en su casa.”
como dice Ken Rogoff, tiene como
consecuencias que crece el número de “indignados” y puede llegar a situaciones
extremas como los disturbios de Londres y de otras ciudades británicas. A esto
dedica TIME gran parte de su número
siguiente, del 22 de agosto, que da a su portada el título fatalista “The
Decline and Fall of Europe” (El declive y la caída de Europa) en el que
demuestra que el problema es tanto o más de Europa que de los EEUU. En este
número Rana Foroohar escribe otro
artículo estelar: “El Fin de Europa – Su unión económica se está desenmarañando,
Londres está en llamas, y su socio comercial del que dependía el continente,
los EEUU, es demasiado débil para salvar el día o el euro. Di adiós al viejo
orden.” Cita de nuevo a Kenneth
Rogoff: “Europa está a punto de
estallar. Ya no es cuestión de permanecer quietos ni de esperar a que los EEUU
vayan a poner en marcha la economía. Tendrán que arreglar las cosas en su casa.”
En este mismo número de TIME, de Nathan Thornburgh, periodista free lance, escribe un artículo sobre
los disturbios de Londres. Dice que “En algún sitio detrás de esta aparente
anarquía están los verdaderos descontentos de Britania.” Y cita el coeficiente Gini de varios países
obtenido a partir de las bases de datos de la OCDE sobre la distribución
salarial y la pobreza. El Coeficiente de Gini es una medida de la
desigualdad ideada por el estadístico italiano Corrado
Gini, que se usa normalmente para medir la desigualdad de los ingresos. El coeficiente de
Gini es un número entre 0 y 1, en donde 0 se corresponde con la perfecta
igualdad (todos tienen los mismos ingresos) y 1 se corresponde con la perfecta
desigualdad (una persona tiene todos los ingresos y los demás ninguno). Por lo tanto, cuanto mayor es el coeficiente,
mayor es la desigualdad. Los peores en Europa son, en este orden: Portugal,
Reino Unido, Italia, Grecia, y España. Entre los mejores, naturalmente Suecia,
que ocupa siempre los mejores puestos en todos los rankings. Nathan Thornburgh
dice que según la OCDE el Reino Unido tiene la peor movilidad social de las
naciones desarrolladas: “los que han
nacido en una determinada clase tienen tendencia a permanecer en ella.” Y
dice también que los EEUU es otro país desarrollado con una gran subclase
inmóvil parecida, y que poco se ha hecho en los años recientes para cambiar la
situación. Cuenta que el desempleo de los jóvenes ha crecido fuertemente en los
últimos tres años y ha alcanzado los niveles de los desempleados en los países
árabes que han sido testigos de las revoluciones de los jóvenes este año.
Nathan Thornburgh cita a un psicólogo social de la Universidad de Liverpool, Clifford Stott, quien define los
disturbios como “una lucha de clases”.
los disturbios de Londres. Dice que “En algún sitio detrás de esta aparente
anarquía están los verdaderos descontentos de Britania.” Y cita el coeficiente Gini de varios países
obtenido a partir de las bases de datos de la OCDE sobre la distribución
salarial y la pobreza. El Coeficiente de Gini es una medida de la
desigualdad ideada por el estadístico italiano Corrado
Gini, que se usa normalmente para medir la desigualdad de los ingresos. El coeficiente de
Gini es un número entre 0 y 1, en donde 0 se corresponde con la perfecta
igualdad (todos tienen los mismos ingresos) y 1 se corresponde con la perfecta
desigualdad (una persona tiene todos los ingresos y los demás ninguno). Por lo tanto, cuanto mayor es el coeficiente,
mayor es la desigualdad. Los peores en Europa son, en este orden: Portugal,
Reino Unido, Italia, Grecia, y España. Entre los mejores, naturalmente Suecia,
que ocupa siempre los mejores puestos en todos los rankings. Nathan Thornburgh
dice que según la OCDE el Reino Unido tiene la peor movilidad social de las
naciones desarrolladas: “los que han
nacido en una determinada clase tienen tendencia a permanecer en ella.” Y
dice también que los EEUU es otro país desarrollado con una gran subclase
inmóvil parecida, y que poco se ha hecho en los años recientes para cambiar la
situación. Cuenta que el desempleo de los jóvenes ha crecido fuertemente en los
últimos tres años y ha alcanzado los niveles de los desempleados en los países
árabes que han sido testigos de las revoluciones de los jóvenes este año.
Nathan Thornburgh cita a un psicólogo social de la Universidad de Liverpool, Clifford Stott, quien define los
disturbios como “una lucha de clases”.
Dice Rana Foroohar
que la situación en la que estamos “es lo
que ocurre después de una profunda crisis financiera que requiere el rescate de
estados asediados, que se han quedado sin los pocos recursos y herramientas
necesarias para hacer frente a un entorno estancado con un alto grado de
desempleo, común a políticas populistas, una inestabilidad social y una
violencia de la especie de la que solo hemos visto el principio en las calles
de Atenas y de Londres.”
que la situación en la que estamos “es lo
que ocurre después de una profunda crisis financiera que requiere el rescate de
estados asediados, que se han quedado sin los pocos recursos y herramientas
necesarias para hacer frente a un entorno estancado con un alto grado de
desempleo, común a políticas populistas, una inestabilidad social y una
violencia de la especie de la que solo hemos visto el principio en las calles
de Atenas y de Londres.”
Si no tomamos las cosas más en serio, ¿no estaremos
preparando una nueva revolución de los proletarios? Tengamos muy en cuenta el
clamor de los “indignados” para no llegar a esto. Es bueno recordarlo hoy, en
este Día Humanitario Mundial, que
las Naciones Unidas han establecido para aumentar la conciencia de las
necesidades humanitarias en todo el mundo, y de la asistencia humanitaria, que
empieza en nuestra propia casa. “Que
aquellos que honramos hoy nos inspiren para comenzar nuestro propio camino para
hacer del mundo un lugar mejor y reunir nuestra familia humana más
estrechamente.”, dijo en ocasión de este Día Ban Ki-moon, Secretario General de las Naciones Unidas. ¿Lo
asumirán los líderes políticos, económicos y financieros?
preparando una nueva revolución de los proletarios? Tengamos muy en cuenta el
clamor de los “indignados” para no llegar a esto. Es bueno recordarlo hoy, en
este Día Humanitario Mundial, que
las Naciones Unidas han establecido para aumentar la conciencia de las
necesidades humanitarias en todo el mundo, y de la asistencia humanitaria, que
empieza en nuestra propia casa. “Que
aquellos que honramos hoy nos inspiren para comenzar nuestro propio camino para
hacer del mundo un lugar mejor y reunir nuestra familia humana más
estrechamente.”, dijo en ocasión de este Día Ban Ki-moon, Secretario General de las Naciones Unidas. ¿Lo
asumirán los líderes políticos, económicos y financieros?