El estudio Women in Business 2017 realizado por Grant Thornton, refleja que uno de cada cuatro puestos directivos en el mundo está ocupado por una mujer. Supone un tímido aumento con respecto al año anterior, pero sigue siendo muy insuficiente. Y teniendo en cuenta que las políticas de igualdad no son las necesarias, este dato está en la línea de lo esperado.
España ha incrementado el porcentaje de mujeres directivas ligeramente de un 26% a un 27%, una subida poco significativa, pero que coloca al país por encima de la media europea que ha pasado de un 24% a un 26%. “A este ritmo, la paridad efectiva de hombres y mujeres en puestos de responsabilidad se conseguiría dentro de 20 años, en 2037”, dice Isabel Perea, socia de Grant Thornton. El dato lamentable es que existe un avance considerable en el número de empresas, tanto españolas como internacionales, sin ninguna mujer en la alta dirección. Mª José Lázaro, socia de auditoría de la firma, explica que la razón está en que las empresas han perdido el primer impulso que tuvieron aplicando medidas pro igualdad, que no se han mantenido en el tiempo y por ello han resultado insuficientes.
El mejor comportamiento para la igualdad en Europa del Este
El gráfico explica que el mejor comportamiento en el terreno de la igualdad lo tienen en Europa del Este. Con Rusia a la cabeza, con un 47% de mujeres directivas, le siguen Estonia, Polonia y Lituania. Esto se debe a la herencia económica y política de los regímenes comunistas. También presentan porcentajes elevados Indonesia (46%) y Filipinas (40%). Debido al crecimiento que se está produciendo, la necesidad que tienen de talento, y la tradición familiar que da apoyo y soporte a las mujeres.
En cuanto a las barreras, coinciden en la misma opinión hombres y mujeres. El 84% de los hombres reconoce que en España existen barreras para el ascenso de la mujer directiva. “Los datos indican que los prejuicios de género siguen prevaleciendo a pesar de las apariencias. Los hombres siguen poniendo énfasis en la conciliación, siendo un arma de doble filo para las carreras de muchas mujeres. La cultura empresarial española y la brecha salarial, son obstáculos que impiden a muchas de ellas continuar su ascenso profesional. Estos obstáculos son poco reconocidos por los hombres”.
Gestión del riesgo y las oportunidades según mujeres y hombres
El estudio analiza cómo gestionan el riesgo y las oportunidades mujeres y hombres. La diferente óptica de cada uno aportaría una diversidad de planteamiento. Ya no es cierto el tópico de que la mujer tiene mayor aversión al riesgo. Las mujeres están dispuestas a asumirlo, solo que lo hacen de una manera menos impulsiva. Tienden primero a no etiquetar la situación y a analizar el contexto antes de tomar la decisión.
Una de las soluciones viene con promover el liderazgo femenino. No se trata de que las mujeres cambien su forma de actuar y comportarse. Se trata de que lideren desde su condición de mujer. La creación de equipos empresariales diversos, con equivalencia de mujeres y hombres, mejoraría su funcionamiento y los resultados. También es crucial tener en cuenta las diferencias en la gestión y la sensibilidad de la mujer directiva.