Si a la gente se le preguntara quien es este hombre, seguramente la mayoría no sabría qué contestar. Sin embargo todo el mundo, o casi, ha oído hablar de Al Gore. Ambos recibieron en 2007 el Premio Nóbel por la Paz por el mismo tema: el Cambio Climático. El que está debajo de los focos es el intérprete. El guionista es invisible, excepto en los círculos académicos.
En una página del último número de TIME (en la sección “Principal Voices” patrocinada por la Shell y la CNN), al Dr. Pachauri le hicieron una serie de preguntas. Una de ellas era por qué el IPCC (*) dijo hace unos años que el calentamiento global no era necesariamente debido al ser humano, y ahora sí. A lo que el Dr. Pachauri contesta que el clima de este planeta efectivamente está cambiando por causas naturales, pero como consecuencia de las investigaciones de los últimos 20 años sabemos con certeza que también es por factores humanos. Desde 1970 hemos incrementado nuestras emisiones de CO2 en un 70%, y los factores humanos se han añadido a los naturales. Y por esto estamos viendo hoy cambios e impactos que no existieron en un principio.
También le preguntaron si países con un desarrollo rápido como China e India tenían que compartir la carga de la lucha contra el cambio climático con los países desarrollados. El Dr. Pachauri considera que esto es un punto de vista muy injusto y muy poco ético. En la India hay 400 millones de personas que no tienen acceso a la electricidad. La India emite una tonelada de CO2 al año por habitante, mientras que los EEUU emiten 20. “Así que, si alguien dice que hay que hacer un reparto sobre una base de igualdad, está diciendo que los moribundos deben seguir muriendo, pero que los que viven en la abundancia pueden seguir consumiendo más y más” reprocha. Opina que el mundo desarrollado se comprometió en 1992 de tomar la iniciativa, pero que, francamente, no ha hecho nada en absoluto. Dice que “en los países en desarrollo existe el sentimiento que los ricos quieren seguir siendo ricos y mantener a los pobres en la pobreza”. Y termina: “Para remover esta sospecha, los países desarrollados deben demostrar que están dispuestos de verdad a hacer lo que prometieron. Entonces recibirán una respuesta positiva de los países en desarrollo”.
La pelota está en nuestro tejado. ¿Estamos realmente dispuestos a ser más austeros? Incluidos los ricos… Se “habla” mucho de “ética”. Los ricos también. ¿Se seguirá hablando y hablando…? Los científicos no pueden cambiar el mundo. Aportan los conocimientos para que todos podamos hacerlo.