Sobre este tema escribe la periodista Mayte Rius en un artículo en La Vanguardia, fechado el 8 de noviembre, bajo el sugestivo título “La vida es riesgo”, y lo ilustra con frases de personas expertas (como la cita del Comisario Europeo, Joaquín Almunia, en nuestro titular). Dice Mayte Rius: “Nos obsesiona la seguridad. Ponemos rejas y alarmas en casa, no dejamos al niño trepar al árbol para que no se caiga,… Condicionamos nuestros hábitos para eliminar el riesgo de nuestras vidas. Pero ya en la antigüedad clásica los filósofos advertían que vivir es desear, y el que desea y algo espera siempre corre riesgo”. 
Para demostrar la necesidad de tomar riesgos en la vida, Mayte Rius cita ejemplos muy variados. Habla de los ejercicios de Elisabeth Egea, pedagoga, con alumnos de la escuela de artes escénicas del colegio Ipsi de Barcelona, de la que es directora. Reflexiona con Rafael Alvira, catedrático de Filosofía de la Universidad de Navarra sobre el umbral del riesgo. Nos habla de Carmelo Vázquez, catedrático de Psicopatología en la Universidad Complutense y referente de la denominada psicología positiva, quien asegura que las personas tendemos a asumir muchos riesgos individuales porque constantemente retamos nuestras capacidades pero, en cambio, cada vez estamos menos dispuestos a asumir riesgos externos, ajenos a nuestro control. Mayte Rius nos explica el papel muy importante de la seguridad que hayamos recibido en la infancia con palabras de Concepción Cirac, psicóloga de la UNED. Y otras facetas interesantes, que se pueden leer en el artículo, aquí.
Para demostrar la necesidad de tomar riesgos en la vida, Mayte Rius cita ejemplos muy variados. Habla de los ejercicios de Elisabeth Egea, pedagoga, con alumnos de la escuela de artes escénicas del colegio Ipsi de Barcelona, de la que es directora. Reflexiona con Rafael Alvira, catedrático de Filosofía de la Universidad de Navarra sobre el umbral del riesgo. Nos habla de Carmelo Vázquez, catedrático de Psicopatología en la Universidad Complutense y referente de la denominada psicología positiva, quien asegura que las personas tendemos a asumir muchos riesgos individuales porque constantemente retamos nuestras capacidades pero, en cambio, cada vez estamos menos dispuestos a asumir riesgos externos, ajenos a nuestro control. Mayte Rius nos explica el papel muy importante de la seguridad que hayamos recibido en la infancia con palabras de Concepción Cirac, psicóloga de la UNED. Y otras facetas interesantes, que se pueden leer en el artículo, aquí.
La disposición para tomar riesgos es apreciada hoy en día por muchos empresarios, porque estimula la creatividad, tan necesaria para innovar. En un artículo, publicado en la página web de la EFQM (European Foundation for Quality Management), Craig Milne, Jefe Ejecutivo de Quality Scotland, da diez consejos prácticos para promover e impulsar la creatividad en el lugar de trabajo y para sacar lo mejor de la gente (“Top tips for creativity in the workplace”, Craig Milne, Quality Scotland, October 2007). Uno de ellos es: “No tengas miedo de cometer errores. Hay que asumir riesgos. No esperes a tener la completa certeza del éxito para aplicar una idea. La competencia puede adelantarse.”
“La optimización de los nuevos recursos tecnológicos y sociales disponibles depende en buena medida de un tejido educativo que refuerce el desarrollo de valores y aptitudes como la asunción de riesgos. Esta última aptitud debe ser transmitida como un mecanismo de aprendizaje en sí mismo. Se trata de que el individuo supere el miedo al fracaso y asuma riesgos, interiorizando como un valor fundamental el aprendizaje de los errores y los fracasos sufridos.” Fue una de las conclusiones importantes sacadas en el I Encuentro de la Comunidad Internacional de Expertos de NSF en diciembre 2004, que trataba sobre la Educación, Valores y Entorno Económico y Laboral.
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