Martin Hirsch, alto Comisario para la Juventud, intentará llevar ad elante un acuerdo en el seno de la comisión que preside sobre un “libro verde”, fruto de tres meses de reflexión por parte de seis grupos de trabajo. El “proyecto de síntesis”, del que Le Monde ha tenido conocimiento, plantea la base de lo que debe ser, después de “concertación”, la nueva política para la juventud.
El método: cambios inmediatos para expresar claramente un cambio de ciclo. En el fondo, la acción debe ser dirigida simultáneamente en varios frentes: orientación, inserción profesional, alojamiento, ciudadanía… Porque la situación particularmente delicada en la que se encuentran los jóvenes es el fruto de la acumulación de factores que a medida que pasa el tiempo están imbricados los unos con los otros.
El método: cambios inmediatos para expresar claramente un cambio de ciclo. En el fondo, la acción debe ser dirigida simultáneamente en varios frentes: orientación, inserción profesional, alojamiento, ciudadanía… Porque la situación particularmente delicada en la que se encuentran los jóvenes es el fruto de la acumulación de factores que a medida que pasa el tiempo están imbricados los unos con los otros.
M. Hirsch era lo más esperado para hablar sobre la autonomía financiera. La izquierda, aguijoneada por la Unión nacional de los estudiantes de Francia (UNEF), primera organización estudiantil, defiende desde hace tiempo una subsidio de autonomía para todos los jóvenes. El proyecto de libro verde no se posiciona. Por eso propone experimentar varias pistas y una de ellas es una dotación de autonomía para acceder a una formación o a un empleo. La idea es facilitar los medios a los jóvenes para ejercer un derecho al error. Entre los 15 y los 18 años, podrían abrir “una cuenta de dotación, con ayuda del Estado en función de la situación de sus padres”. Esta medida costaría de 1,6 a 2 billones de euros. Según la hipótesis presentada, un joven dispondría de 4.000 euros máximo a los 18 años. Se contempla “un complemento universal” (1.000 euros a los 18 años para todos), como un préstamo del orden de 10.000 euros para todo joven a partir de 18 años, a rembolsar “cuando su situación profesional sea estable”.
Otro escenario de medidas contempladas: una ayuda específica para los jóvenes sin empleo o sin formación, un complemento de recursos para los estudiantes o préstamos para financiar un proyecto.
Otro escenario de medidas contempladas: una ayuda específica para los jóvenes sin empleo o sin formación, un complemento de recursos para los estudiantes o préstamos para financiar un proyecto.